miércoles, 14 de abril de 2010

Psíquicamente muerta

Físicamente desmejorada, razonablemente cansada.
Todo está sujeto por un pequeño hilo, en mis manos las tijeras que harán que todo acabe y una tela de araña que conseguirá que llegue al final, pero no soy consciente de mis decisiones las llevo a cabo sin que la razón llegue a actuar. El estado de vigilia se confunde con la propia vida y los sueños ya no existen, no recuerdo la última noche que dormí ocho horas o seis quizás.
Una marioneta con conciencia pero sin voluntad.

1 comentario: